11 MANERAS DE CUIDAR EL MEDIO AMBIENTE A NIVEL DOMÉSTICO



Puede que las fake news sobre reciclaje, la resistencia personal al cambio y el coste que supone, nos disuadan de tomar una actitud responsable y sostenible con el planeta Tierra.
Por ello, voy a enumerar una serie de pautas que podemos interiorizar de forma fácil, cómoda y barata, convirtiéndolas en hábitos.
  1. Usar jabón de pastilla, en vez de líquido en envase de litro, minorando la dependencia del plástico.
  2. Aprovechar el agua de la ducha hasta que llega a la temperatura deseada, almacenándola y vertiéndola, a posteriori, por el inodoro, ahorrando una carga o dos de agua de la cisterna.
  3. Ducha corta, no hace falta convertir a diario el baño en un SPA. La piel, el bolsillo y el medio ambiente te lo agradecerán.
  4. Pensar antes de comprar, debilitando el impulso. Probablemente tenga como consecuencia, que lo hagas de forma responsable y acabes comprando; menos, en establecimientos de cercanía o km0 y de mayor calidad. Esto influirá positivamente en la economía local y en las emisiones de CO2.
  5. Reciclar para aprovechar los residuos de nuestra actividad y que su tratamiento sea el adecuado.
  6. Llevar una taza y cucharilla al trabajo, sustituyendo el vaso y el palito de plástico que sale de la máquina de café.
  7. No comprar comida super-envasada, si existe una alternativa. Un ejemplo de ello es la fruta, que se puede comprar a granel en bolsas de cartón o biodegradables sin usar bandejas y film. Hay muchas cadenas de supermercados que ya lo hacen.
  8. Afeitarse sin derrochar agua, usando una palangana con agua o el lavabo con el tapón puesto.
  9. Hacer uso de la bicicleta, de nuestras piernas, del patinete u otras alternativas eléctricas para movernos. Nos proporcionará salud física y mental, mejorando, también, la calidad del aire y reduciendo la contaminación acústica. El coste de una bicicleta que se use  2 o 3 veces a la semana, se amortiza en un sólo año, comparándolo con el coste de un abono de trasporte público. Además, existen bicicletas y patines de los ayuntamientos con coste semigratuito o gratuito.
  10. Lavar la ropa con agua fría. Con los actuales detergentes, no hace falta lavarla con caliente para un resultado óptimo. De esta forma reducimos la dependencia energética. 
  11. Alargar la vida de la ropa y el calzado, reparándolos/cosiendolos. Cabe recordar, que la industria textil es la segunda más contaminante, detrás de la petroquímica.
Inevitablemente, el ser humano genera residuos con su actividad, pero está en nuestra mano reducir su impacto hasta hacerlo sostenible e incluso neutro. No es un capricho, es supervivencia.

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